Quizás termine odiando el amor

Mis fuerzas ya llegan a su fin,
el angosto camino que tomé no tiene salida.
Demasiado tarde para volver atrás
demasiado tarde para volverme a ilusionar.

Sólo te diré que si me ves descansar sobre el frío suelo,
es porque me cuesta reconocer la derrota
ya que, tras la ofensiva final,
solo me queda por arma el blanco pañuelo

Esto no es un texto de despedida
son sólo palabras de lamento
Lágrimas que expresa mi alma
por mostrarte todo lo que llevo dentro

El destino nos muestra sus caprichos,
para al final acabar siendo benevolente
y hacer que aquellos que debían conocerse
lo hagan de la forma mas brutal y sorprendente.

El que lastima es el maldito tiempo,
que nos coloca fuera de toda lógica,
para que donde había futuro muestre pasado
y donde hay presente alcances el infinito.

Esto no es un texto de despedida
son sólo palabras de lamento
Lágrimas que derraman mis ojos
por ver mas allá de esta monótona vida.

Quizás termine odiando el amor
porque estoy cansado de amar
Sólo necesito que me des algo de calor
para ayudarme a olvidar el olvido.

Pido que me recuerdes en mi máximo esplendor,
ya que, como todos, he tenido momentos de vulgaridad
Me entregué a ti con todo mi amor
para morir tan cerca de mi añorada felicidad.

Esto no es un texto de despedida
son sólo palabras de lamento
Lágrimas que expresan el dolor de esta larga agonía
que me está matando en vida.

2 comentarios:

  1. Taxigirl Chianti1 de abril de 2009, 3:31

    NUNCA es demasiado tarde
    el tiempo lo marca uno mismo
    la lógica lucha por distinguir
    un razonamiento correcto de uno incorrecto

    Escogemos caminos en la vida
    muchas veces equivocados
    que nos llevan al olvido de lo que fuimos
    y de lo que somos entre otras cosas
    pero no debemos dejar escapar la ilusión
    esa misma que nos puede llevar a la felicidad

    La alegría y el optimismo
    mantienen ese rayo de luz
    que necesitamos,esa tranquilidad
    es el descanso del guerrero.

    El destino verdaderamente es caprichoso
    no siempre nos lleva,a veces nos regresa
    se encarga de barajar las cartas de la vida
    pero nosotros somos quienes repartimos

    Esto no es un texto de despedida
    son sólo palabras de aliento
    Lágrimas que salen de mis ojos
    al ver como esa agonía
    te está matando en vida.

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  2. No te rindas, seguro que encuentras el buen camino. Estados de ánimo son los que nos guian. Además, el triunfo que más se valora es el que conlleva sufrimiento.

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